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Una persona señalando una pizarra con un triángulo

Las operaciones triangulares están ahí y ya son parte del día a día de casi todo el mundo, aunque no lo sepan.

El auge de Internet y el consiguiente crecimiento del comercio internacional han conseguido que los «tríos empresariales» solo hayan ido a más.

Y a más, y a más… hasta el punto de ver como lo más normal del mundo la figura del intermediario.

Sí, el intermediario es uno de los tres protagonistas de las operaciones triangulares, pero no el único.

El proveedor y el cliente final —que no es un cliente particular que compra, sino una empresa compradora— son las dos figuras que nos faltan.

Si nos vamos a la fiscalidad, la cosa se complica mucho… porque en las operaciones triangulares, los protagonistas se ubican en países diferentes.

Y el IVA de las operaciones triangulares en ese caso, claro, puede ser un cacao de aúpa si no se conoce la regla.

¿Sabes que hay un régimen de tributación especial para estos casos?

Te lo contamos enseguida, que tiene su intríngulis, pero empecemos por el principio.

¿Qué son las operaciones triangulares en el comercio internacional?

Son operaciones en las que intervienen tres o más protagonistas, con la particularidad de que se encuentran en países diferentes.

Los protagonistas, como te contábamos antes, son estos:

  • El proveedor: es el fabricante. El origen, el principio de todo. El que tiene un producto que quiere vender, vamos.
  • El comprador: es el cliente final. La empresa compradora que, al final del todo, recibirá el producto que haya comprado. La que se deja la pasta, vamos 💸
  • El intermediario: es el que vende el producto del proveedor a la empresa compradora o cliente final.

En las operaciones triangulares el proveedor y el comprador deben estar ubicados en países diferentes, o la cosa no tendría sentido.

Y ojo, importante: el intermediario nunca es el que se encarga del transporte de las mercancías, aunque sí de su gestión.

Si un proveedor vende un teléfono móvil desde A a una empresa compradora en B a través del intermediario, el transporte de ese teléfono móvil entre A y B lo paga la empresa compradora.

La mercancía nunca pasa por el intermediario, algo que suele llevar a confusión.

En la operativa del comercio exterior esto es de lo más normal.

Y tú te preguntarás: y estas situaciones… ¿por qué tienen un tratamiento especial? ¿Por qué si hay un intermediario entre países el tema genera tanto interés?

Y la respuesta no es que genere tanto interés, sino que existe una legislación en la Unión Europea que facilita la contabilidad de estas operaciones, como verás enseguida.

Sectores que suelen participar en operaciones triangulares

Empresas de textil, químico o el retail recurren mucho —lógicamente— a las operaciones triangulares por la cantidad de materiales que necesitan.

El clásico ejemplo de operación triangular podría ser el de la telefonía móvil de una marca asiática, proveedor que vende directamente desde, por ejemplo, Corea del Sur.

El comprador, que se ubica en España y es la empresa que va a comprar el teléfono, es el que paga… pero no a la empresa asiática, sino al intermediario.

El intermediario es una empresa española que facilita a la empresa compradora la compra del terminal asiático. 

Se encarga de gestionar la información del envío del producto, las dudas del comprador, las incidencias que puedan surgir… En fin, cualquier cosa relativa a la mercancía.

¿Y la factura?

¿Y el IVA de esta operación triangular?

Pues cada operación es una historia distinta; por lo que para responder a eso, primero tenemos que ver los tres tipos.

Tipos de operaciones triangulares

Hay tres tipos de operaciones triangulares: las intracomunitarias, las extracomunitarias mixtas y las extracomunitarias puras.

Y en las tres hay que considerar este hecho: el intermediario tiene que estar dado de alta como operador intracomunitario en su país; si no, el régimen de tributación especial que simplifica tanto el tratamiento de IVA no aplicaría.

Operaciones triangulares intracomunitarias

Se da cuando proveedor, comprador e intermediario se encuentran en tres países miembros de la Unión Europea.

Es como si una empresa española compra un producto italiano a través de un intermediario también español.

Operaciones triangulares extracomunitarias mixtas

Nos metemos en las extracomunitarias y empezamos por las mixtas.

En las operaciones triangulares mixtas, bien el proveedor o la empresa compradora —solo uno de los dos— se encuentra fuera de la Unión Europea.

Un ejemplo de operación triangular mixta podría ser cuando una empresa española compra un producto de un proveedor mexicano a través de un intermediario también español.

Operaciones triangulares extracomunitarias puras

Si en las mixtas solo era de fuera de la UE uno de los dos, seguro que ya te haces una idea de cómo va la cosa en las puras.

Pues sí: en las operaciones triangulares puras —extracomunitarias puras, claro—, el proveedor y el comprador, los dos, pertenecen a un país de fuera de la Unión Europea.

El IVA de las operaciones triangulares extracomunitarias, sean mixtas o puras, se trata de forma diferente a cuando es una operación triangular intracomunitaria.

El IVA, sí, porque por fin ha llegado el momento de ver cómo se comporta en cada caso.

Las operaciones triangulares y el IVA

La gracia de todo esto es que en las operaciones triangulares existe un régimen de tributación especial que simplifica bastante el tratamiento del IVA en las operaciones.

Porque si no se hiciera… Puf. ¿Qué IVA se aplica, el del país del proveedor o el del intermediario? ¿O el del comprador?

¿Y si es un producto exento de IVA en un país pero no en el otro?

¿Y el transporte? ¿Tributa? ¿Quién lo paga?

¿Y qué hay que poner en las facturas?

Las preguntas serían muchas. En las operaciones triangulares, que facilitan su fiscalidad y tienen como objetivo fomentar los intercambios entre países de la UE, hay que tener en cuenta de qué tipo son y aplicar la regla correspondiente.

Y fin, a dedicar el tiempo a otra cosa más importante, como por ejemplo tratar de aumentar la facturación de tu empresa 😎

Venga, vamos a ver qué pasa con el IVA en los tres tipos de operaciones triangulares.

IVA en operaciones triangulares intracomunitarias

Las operaciones triangulares intracomunitarias están exentas de IVA solo si el intermediario radica en un estado miembro diferente al del proveedor y comprador.

En este caso, el proveedor le enviará al intermediario una factura sin IVA.

El intermediario, a su vez, generará una factura también sin IVA y se la dará al comprador… que tendrá que autorrepercutirse el IVA en su país.

¿¡Cómo!?

Pues eso: que el comprador al final paga por algo sin ningún tipo de IVA, pero tiene que incluir el porcentaje correspondiente en su declaración trimestral o anual.

Para ello, que no cunda el pánico, solo tiene que declararlo como IVA repercutido y como IVA soportado, de modo que se anulen entre ellos y no genere ningún cambio en su economía.

¿Y si el intermediario está en el mismo estado miembro de la UE que el proveedor?

Pues que comprará al proveedor con el IVA y venderá al comprador final sin IVA.

Y la última vuelta de tuerca: ¿y si el intermediario está en el mismo estado miembro de la UE que el comprador?

En este caso, comprará al proveedor sin IVA y venderá al comprador con IVA.

IVA en operaciones triangulares extracomunitarias mixtas

Aquí hay dos supuestos.

Si hablamos de exportaciones en las operaciones triangulares mixtas, en las que el proveedor es de la UE y el comprador de un país no comunitario, no habrá IVA.

En el caso contrario —una importación, en la que el comprador es de un país miembro de la UE y el proveedor no—viene lo complicado: el comprador tendrá que pagar el IVA correspondiente una vez el producto llegue a la aduana de su país, así como hacer frente a un posible segundo pago por los aranceles generados.

IVA en operaciones triangulares extracomunitarias puras

En las operaciones triangulares puras, en las que tanto comprador como proveedor son de fuera de la UE, no se genera IVA de ningún tipo.

Así pues, en ninguna de las dos facturas —la del proveedor al intermediario y la del intermediario al cliente final— aparecerá IVA.

Sencillo, ¿no?

Como ves, son solo tres cosas a tener en cuenta:

  • El intermediario tiene que estar dado de alta como operador intracomunitario.
  • Si es una operación triangular intracomunitaria, dependerá de si se encuentran en tres estados miembros distintos o dos de ellos coinciden. 
  • En una extracomunitaria mixta no habrá IVA en las exportaciones, pero sí en las importaciones.
  • Si es una extracomunitaria pura y el comprador está fuera de la UE no habrá IVA; si es al revés y el que está fuera de la UE es el proveedor, el comprador tendrá que pagar el IVA correspondiente —así como los posibles aranceles— una vez la compra llegue a la frontera.

Ejemplo de operación triangular y su IVA según los tres escenarios posibles

Vamos a aterrizarlo todo con un mismo ejemplo.

Nuestros protagonistas son estos:

  • El proveedor A
  • El intermediario B, dado de alta como operador intracomunitario
  • El cliente comprador C

Y un producto que A vende a B por 500 €, mientras que B se lo vende a C por 600 €.

Si tanto A como C residen en un país de la UE estaríamos en una operación triangular intracomunitaria, por lo que dependería del país del intermediario.

Si el intermediario está un país distinto al del proveedor y al del comprador:

  • A emitirá una factura de 500 € a B
  • B emitirá una factura de 600 € a C
  • C pagará 600 € y en su trimestre declarará esos 600 €, aunque incluirá también el 21 % de esos 600 € como IVA soportado y también como IVA repercutido

Y si está en el mismo país que el proveedor:

  • A emitirá una factura de 500 € + IVA a B
  • B emitirá una factura de 600 € a C, sin IVA

Finalmente, si el intermediario está en el mismo país que el comprador:

  • A emitirá una factura de 500 € a B
  • B emitirá una factura de 600 € + IVA a C

Y ya tendríamos las intracomunitarias.

Si A reside en la UE pero no así C estaríamos en una operación triangular extracomunitaria mixta, en la que:

  • A emitirá una factura de 500 € a B
  • B emitirá una factura de 600 € a C

Sería una operación triangular exenta de IVA.

Si es al revés y C reside en la UE pero no así A, entonces:

  • A emitirá una factura de 500 € a B
  • B emitirá una factura de 600 € + IVA a C
  • C pagará esos 600 € + IVA, y quizá un suplemento en concepto de aranceles

Y si ni A ni C están dentro de la UE hablaríamos de una operación triangular extracomunitaria pura, en la que:

  • A emitirá una factura de 500 € a B
  • B emitirá una factura de 600 € a C
  • C acabará pagando 600 €

Listo 👌

Cómo Pleo puede ayudar con las facturas de operaciones triangulares

Aaay el comercio internacional… qué de cosas tiene.

Si es que te pones a mezclar países y claro, por mucha Unión Europa que haya la cosa tiene todas las papeletas para complicarse por la cantidad de tipos de gastos que hay.

Menos mal que con las operaciones triangulares lo han puesto facilito 😅

Porque el IVA, además de algún que otro dolor de cabeza, también es una oportunidad para ahorrar si tu empresa cuenta con la información y los medios adecuados.

Y porque esa oportunidad de ahorrar se multiplica cuando tu negocio se expande internacionalmente… mientras que los dolores de cabeza se reducen al mínimo. Minimísimo, de hecho; ya has visto lo fácil que es tratar el IVA en las operaciones triangulares.

En fin: proveedor, intermediario o comprador que opera internacionalmente, en Pleo hay una solución para tu gestión de gastos👋

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